Jungle Speed es un juego de cartas rápido y sencillo de aprender para incluso 8 jugadores.
Cuando busco un buen "party game", mis requisitos son los siguientes: que sea bastante fácil de aprender, que sea interactivo, que haya oportunidad de que pueda participar un buen grupo de personas en las partidas, y que estas no sean eternas. Nadie quiere sentarse durante veinte minutos para escuchar una explicación de las reglas cuando lo único que buscas es echar un trago y pasar un buen rato.
Así que cuando tomo la decisión sobre qué juegos llevarme a una quedada, una de las primeras cosas que agarro es la bolsa con el Jungle Speed (sí, llevo el juego en una bolsa con una cebra estampada). Con cerca de 2 minutos de explicación de las reglas, un tiempo de juego de poco más de veinte minutos y un montón de interacción entre los participantes, Jungle Speed nunca me ha defraudado.
Primer vistazo:
El objeto de Jungle Speed es deshacerse de todas las cartas de la baraja. Cada jugador tiene un mazo de igual tamaño lleno de cartas con dibujos diferentes. El juego transcurre mientras los jugadores le van dando vuelta a sus cartas hasta que las de dos personas coinciden, en cuyo caso se producirá un movimiento enloquecido por agarrar el tótem que está en el centro de la mesa. El ganador le entregará sus cartas descubiertas al perdedor y el juego continuará hasta que alguien consiga deshacerse de todas las cartas.
Componentes:
En Jungle Speed no hay muchos componentes. Tenemos una baraja de cartas de forma cuadrada, cada una de ellas con un dibujo a color. Aunque las cartas tengan una buena calidad y sean difíciles de romper, a menos que decidas doblarlas, hay muchas posibilidades de que se vayan estropeando con bastante rapidez. Normalmente, eso es algo que me enfurecería (ya que me gusta mantener mis juegos en perfecto estado), pero como Jungle Speed es un juego social caótico, no me importa demasiado que mis cartas acaben con algún rasguño de "amor".
El otro objeto que se incluye en la caja es el Tótem. Un pequeño... cilindro (no se me ocurre otra palabra para describirlo) de madera, que al principio se quedará posado en mitad de la mesa. Debería comentar que mientras que mi edición del juego venía con un tótem hecho de madera, la ediciones más recientes tienen un tótem de plástico o de gomaespuma. No estoy seguro de si es para ahorrar costes de producción o para evitar daños colaterales (luego hablaré de eso), pero a mí me gusta el peso que tiene el de madera, y te animo a conseguir esta versión si sigue disponible en el mercado.
Cómo se juega:
Como he mencionado antes, el juego es bastante sencillo. Una vez que las cartas se han repartido en montones equivalentes entre los jugadores, uno de ellos empezará a darle la vuelta a las suyas. Luego, el siguiente jugador hará lo mismo. Y así sucesivamente. El juego seguirá desarrollándose de igual forma hasta que dos de los jugadores tengan los mismos símbolos en sus cartas. Cuando esto ocurra, el jugador que haya conseguido agarrar primero el tótem, le entregará todas sus cartas descubiertas al perdedor. Este las meterá en la parte de abajo de su montón, y finalmente se seguirá jugando de la misma forma. ¡Tienes que ser el primero en deshacerte de todas tus cartas y entonces serás el primero en ganar!
El juego se complica gracias a algunas cartas especiales, que van desde aquella con la que todos los jugadores tendrán que desvelar una de sus cartas al mismo tiempo hasta esa otra con la que hay que lanzarse a por el tótem cuanto antes. Otra cambiará el juego de forma que ignores los símbolos y te centres tan sólo en el color. Y eso es todo. La mecánica del juego es sencilla, rápida e intensa.
La experiencia de juego:
Y entonces, ¿qué tal jugando con Jungle Speed? Pues para empezar, te diviertes un montón. La mayoría de mis partidas con nuevos jugadores siempre transcurren de la misma forma. Todo el mundo voltea las cartas de forma casual según le va tocando el turno. Mientras los jugadores empiezan a perder enfrentamientos y a adquirir más y más cartas, puedes sentir cómo aumenta la tensión. La gente empezará a acercarse unas pulgadas más al tótem que está en el centro de la mesa hasta que se produzca una coincidencia en el dibujo de las cartas. Cuando eso suceda, cuidado, porque se desatará el infierno. Por lo menos una o dos veces a lo largo del juego el tótem ha salido volando por toda la habitación según alguien lo ha agarrado de mala manera (¡y ay del jugador que lo derribe accidentalmente, deberá quedarse con todas las cartas descubiertas que están sobre la mesa!)
Al jugar con Jungle Speed las bebidas y la comida no están permitidas encima de la mesa. Hay que quitarse los afilados anillos de boda. Por decirlo sin rodeos, alguien saldrá herido. Por lo general suele ser en forma de arañazos o cortes en los dedos a medida que la gente se lanza contra ese tótem tan difícil de alcanzar. He visto a un jugador literalmente caído encima de la mesa combatiendo con otro por el control del tótem.
Y ahí es donde reposa la verdadera diversión de Jungle Speed. En el caos. Casi siempre, en algún momento del juego dos jugadores rodarán por el suelo en su lucha por hacerse con el tótem. A veces incluso terminarán bordeando el combate de lucha libre, pero al final uno de los dos se hará con el triunfo mientras el resto de jugadores se ríen histéricamente. Realmente supone todo un espectáculo.
Así que, claro, Jungle Speed no sólo está hecho para el grupo de jugadores casual que busca juegos visuales. Puede ser intenso, altamente competitivo y siempre hay una oportunidad de recibir algo de ligero daño. Sin embargo, por lo general supone todo un emocionante viaje.
Últimas consideraciones:
Así que no debería sorprender mucho que Jungle Speed sea uno de mis juegos de fiesta favoritos. Es ágil, fácil de enseñar, pueden jugar hasta ocho jugadores y es altamente interactivo, por lo que cumple todos mis requisitos a la hora de entretenerme con un "party game". Jungle Speed no impresionará a nadie por su profunda temática o sus componentes de alta calidad. Pero eso también me parece bien. Este juego en realidad trata sobre la propia experiencia de juego.
Jungle Speed también es un juego que ayuda a que los jugadores alcancen el estado de ánimo adecuado. Si estás buscando un juego relajante para terminar la noche, sin duda no será la mejor opción.
Sin embargo, si quieres enseñarles algo nuevo a tus amigos, sean o no jugadores habituales, no busques más. Haz la prueba y asegúrate de que no haya nada que se pueda destruir por los alrededores.
Puntuación final: 4 estrellas sobre 5. Un "party game" interactivo y de rápido ritmo al que pueden jugar hasta ocho jugadores. Es perfecto para las reuniones sociales.
Puntos fuertes:
• La partida dura unos veinte minutos
• Las reglas son muy fáciles
• Es altamente interactivo
• Si eres alguien competitivo, te encantará el caos que se provoca con el juego
Puntos débiles:
• Aunque pueden jugar entre 2 y 8 jugadores, realmente necesitarás al menos 4 participantes
• Pueden producirse daños, la propiedad puede ser destruida. (Aunque esto también puede considerarse como parte de la diversión)
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