miércoles, 27 de julio de 2016

GOTHAM CENTRAL GAZETTE #5

Las editoriales no dejan de editar tebeos ni en el período estival, amig@s, y por fin este mes vamos a tener la oportunidad de catar los números anteriores al famoso Amazing Fantasy nº 15 donde apareció el trepamuros de la Marvel por primera vez. En un tomo de la colección Marvel Limited Edition aparecerán las historias que elucubraron Steve Ditko, Jack Kirby y Stan Lee antes de que los super-tipos lo inundaran todo...
Hace nada acaban de materializarse en nuestra tienda jugosas recopilaciones del Zot! de McCloud o del Elfquest de Richard y Wendy Pini. Ninguno de estos dos títulos deberían permanecer ausentes de las estanterías de cualquier aficionado al cómic en general. En el primero Scott McCloud, también teórico del Noveno Arte, transformó el universo de su personaje Zot! en un entorno tan indie que poco tenía que ver con las anteriores aventuras llenas de energía y descerebre, cercanas a la ciencia ficción alocada, con las que se había iniciado la serie publicada en un principio por Eclipse en pleno momento de efervescencia de editoriales independientes y alternativas, los ochenta. Tanto es así, tanta diferencia existe entre la anterior etapa y esta recién reeditada por Planeta en un tomo, que McCloud ha renegado de sus primeros números, comentando que no quiere verlos reeditados de forma oficial. Afortunadamente en España esa primera etapa denostada por el artista apareció en los quioscos en diez grapas que son relativamente fáciles de encontrar por un precio asequible. Eso sí, donde el artista dio el do de pecho fue en el material tremendamente humano que se puede encontrar en este "Zot! 1987-1991."
En cuanto a Elfquest, 001 Ediciones ha confirmado que la larga saga será editada en tomos cada tres meses a un precio imbatible. En apenas dos mamotretos (el primero cuesta 23 euros y contiene los primeros diez números de la saga, el segundo con los diez siguientes será publicado en octubre) machacaremos la anterior edición de Norma Editorial, que había reducido este material al formato manga, quizá en un intento por llamar la atención de otro público. Con dicha miniaturización nos perdíamos los asombrosos dibujos de Elfquest, muy cercanos -por ejemplo- al estilo desgranado por John Byrne en sus mejores momentos, mientras que la sólida historia hilvana un relato de fantasía con una pizca de CF espolvoreada aquí y sobre todo allá (al final del próximo tomo) contándonos la saga de los elfos más longevos de la historia. Y todo ello desde la (originalmente) auto-edición más combativa.
Si hay un mangaka que nade con estilo propio en las procelosas aguas del terror al que hayamos cogido cariño rápidamente, ese es Junji Ito. Su obra apareció relativamente pronto en nuestro país de la mano de Planeta en su colección Pachinko, en una edición bastante deplorable (aunque barata) donde también pudimos catar el afamado Monster de Naoki Urasawa o El Almanaque de mi Padre de Jiro Taniguchi. La obra de Ito escogida por Planeta fue Uzumaki. En sus obras, el autor nacido en 1963 en la prefectura de Gifu (Japón) cultiva un terror de la nueva carne, donde los cuerpos humanos son modificables y las sensaciones y circunstancias que envuelven a sus personajes tienen siempre un aire malsano y asfixiante. Hay un tremendo fatalismo en estos tebeos, como si los protagonistas nunca pudieran librarse de su destino aciago, condenados por su demiurgo al peor final posible, sin salvación. Mucho tendrá que ver con esta decisión creativa las influencias reconocidas del autor, Koga Shinsaku (otro mangaka que practica la virulencia en forma de horror), Hideshi Hino (Panorama Infernal se encuentra en nuestra lista de mejores tebeos de miedo), Yasutaka Tsutsui (autor que se decanta por la ciencia ficción y del que en España se ha publicado su manga La chica que viaja en el tiempo) y cómo no, H.P. Lovecraft, supremo hacedor del mal rollo adorado en oriente y occidente por igual. En apenas un par de días ECC va a publicar hasta cuatro nuevos títulos de Junji Ito (Las Caprichosas Maldiciones De Sôichi Vol. 1 (parece que finalmente este título se ha retrasado), El Muerto Enfermo De Amor, Junji Ito: Relatos Terroríficos Núm. 1 y Tomie Vol. 1), que junto al reciente Voces en la Oscuridad (1 de 2, Tomodomo) ha propiciado que este asfixiante agosto se convierta en el mes no oficial del autor en nuestro país. 
Grant Morrison nunca se pasa de moda. Lo último que vamos a poder ver -y leer- traducido es su versión de Wonder Woman junto a Yanick Paquette, además del tercer tomo (de cuatro) de Zenith, donde reinterpretaba el trabajo con super-héroes nihilistas de Alan Moore y Jim Starlin, y el último tocho con su etapa en Animal Man. Además ECC ha anunciado que es posible que a finales de año nos alegren las entendenderas (la cartera es otro decir) con su DOOM PATROL recopilada en tomos. Esta sí, esta obra no la podéis dejar escapar. Os dejamos un documental titulado Hablando con los Dioses donde su director Patrick Meaney intenta ofrecer un retrato fehaciente del artista escocés.
De Chew ya hablamos en su momento, pero nos encanta que la serie enfile su recta final (solo falta un futuro doceavo ejemplar) y podamos disfrutarla al completo en castellano. Precisamente ha sido en este mes de agosto (mes en el que tradicionalmente la editorial suele echar el freno y editar poquita cantidadcuando Planeta ha decidido sacar su penúltimo arco titulado Las últimas cenas... Un tebeo para llevarse a la playa, tumbarse a la bartola, leer con la sonrisa torcida ante el humor negro que nos asalta las retinas. Aunque claro, no lo recomendamos paladear mientras se está comiendo, porque...
Para nosotros la canción del verano es "Nitro" de Dick Dale. Nos acabamos de enterar que con 79 añazos el músico no deja de tocar allá donde le requieran para poder pagarse una grave enfermedad. En la banda sonora de Pulp Fiction apareció su genial "Misirlou", aunque el tema no consiguió sacarlo del anonimato excepto para unos cuántos enterados. Indagar en su discografía, repleta de música instrumental y fiera, provoca jolgorio y alegría, y sobre todo evoca la vida del surfista de la que siempre ha hecho gala este tremendo guitarrista.

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