RESEÑA DE X-WING EN THE SCAPIST MAGAZINE (parte 2 de 2)

Reseña de Jonathan Bolding, 2014. 
Parte 1. 

La calidad de las miniaturas y componentes son los típicos en un juego de Fantasy Flight, bastante elevados, con buenos detalles y realizados en plástico duradero. Las naves en particular están entre algunas de las miniaturas de más alta calidad pre-pintadas que hay ahora mismo disponibles en el mercado. Suponen una buena adición a la colección de cualquier fan de Star Wars.

Dicha calidad, sin embargo, trae consigo el único inconveniente del juego: el precio. No es barato. No es barato empezarlo a jugar, ni coleccionarlo, ni hacerte con un conjunto mínimo para jugar. El conjunto básico de tres naves y las plantillas está en torno a los 35 euros, y con eso solo consigues el material básico para dos personas con el que aprender las reglas del juego y con algunos de los componentes con los que jugar. Pero no significa que consigas las naves suficientes como para jugar una batalla completa, por lo que terminarás comprándote más naves individuales por unos 13 euros cada una como mínimo. Ahora, algunas naves individuales incluyen una buena variedad de pilotos y cartas como androides o armas, pero el precio sigue siendo muy alto. Mientras que este juego no es tan caro como uno del estilo de Warhammer, ni tampoco azuza el afán coleccionista como lo hacen marcas como Heroclix, sin duda sigue siendo un juego en el que tienes que hacer una inversión mínima razonable para poder jugar. Si quieres desplegar una fuerza considerable contra tus amigos tendrás que pagar en torno a los cien euros, aunque podrías quedarte contento con esa cifra y no volver a gastar más dinero en el juego. Al igual que ocurre con cualquier juego de miniaturas, tienes que equilibrar lo que estás dispuesto a pagar y el tipo de diversión que estás buscando.

Porque sencillamente una sola caja no resulta suficiente. Comprar la caja básica no supone tener el juego completo. Y además nunca tendrá suficientes lujosas miniaturas de X-Wing. Nunca.

Conclusión: X-Wing supone una experiencia táctica rápida y divertida que se encuentra entre los mejores juegos de miniaturas que hayan sido puestos sobre una mesa.

Recomendación: Si X-Wing no te parece muy divertido pero te atrae un poco el tema, intenta probarlo, aunque deberías tener cuidado con la inversión que requiere.